Después de 8 años de estar detrás
de un monitor tengo la mayor certeza (aunque
siempre lo he sabido) de que mi camino no es estar detrás de una pantalla sin voz,
día tras día, viendo pasar las horas trabajando los intereses de alguien más,
no es lo que me gusta de la vida, no es lo que quiero ser, y si es lo que me he
impuesto durante mucho tiempo ser, solo que hoy lo digo no en son de queja, ni
de súplica de que mi vida cambie, lo digo con toda la responsabilidad aunque aún no con la mejor coherencia, necesito desarrollarme
de otra manera, de manera más real, para sentir luz, no quiero ser irresponsable
pero si quiero desarrollar el camino para generarlo de tal forma que la vida fluya
conmigo y hacía allá, ya sé que lo será porque
además de ayudarme a mi ayudará a mucha
gente por lo cual mi camino SERÁ, solo falta no perder el coraje y la valentía de hacer lo necesario… Sabina siempre
ha sido quien aporta eso, esa visión limpia,
pura y sincera de mi ser, Sabina tan melancólica y pasional, tan esperanzada y tan realista, tan observadora y tan idealista, tan
triste. Sabina tan soñadora y tan miedosa, Sabina tan sabia con tanta luz, con tanto amor y
con tanta dulzura, con tanta vida que muere cada segundo, con tanta muerte q vive cada minuto… Sabina esta vez lo logrará.
lunes, 6 de enero de 2014
Suscribirse a:
Entradas (Atom)